Otra instantánea de Agostina  llena de alegría y expresividad.
El mayor acierto de Esteban es haber sabido disparar en el momento oportuno. Cuando queramos obtener fotos de niños, deberemos tener mucha paciencia y disparar muchas fotos (que habrá que desechar) hasta que el niño se acostumbre a la cámara y se sienta cómodo.

Para mejorar la foto hubiese sido interesante escoger un fondo más sencillo y utilizar un objetivo de mayor focal. En interiores el gran angular es una gran ayuda, pues "aleja" la escena de la cámara (el ángulo de visión es mayor que el del objetivo normal y mucho más amplio que el de los teleobjetivos), pero tiene el inconveniente de reproducir desproporcionadamente las partes del cuerpo que se encuentran más cerca de la cámara, en este caso el brazo y la mano de la madre.